Ingredientes:
- 120 gramos de bacon en taquitos
- 100 gramos de queso rallado (se puede usar cualquiera, nosotros escogimos la mezcla de tres quesos: gouda, cheddar y emmental).
- 175 gramos de harina.
- 1 cucharadita de levadura
- 1/2 cucharadita de sal
- 85 gramos de mantequilla derretida
- 2 huevos
- 200 ml de leche
- Orégano y pimienta al gusto (en realidad podéis usar cualquier especie o hierva que prefiráis: perejil, tomillo, eneldo...)
Preparación:
Lo primero de todo es poner a calentar el horno a 180º, para que vaya cogiendo calor mientras hacemos los pasos. Cogemos el molde que vayamos a usar para nuestros muffins y lo recubrimos de mantequilla y pan rallado para que no se nos peguen una vez hechos al sacarlo. Una vez hecho esto, ponemos el bacon en un recipiente apto para el microondas y lo ponemos en él durante unos minutos para que se haga, después lo colocamos en un plato con una servilleta para absorver el aceite. A continuación tomaremos dos bol: uno para mezclar los ingredientes secos (harina, levadura, sal, pimienta y óregano) y otro para los húmedos (la leche, mantequilla y los huevos). Mezclamos los ingredientes secos en su bol, y haremos lo mismo con los húmedos y su respectivo recipiente. Una vez bien mezclados, incorporaremos los húmedos a los secos, y les añadimos el bacon y el queso, guardando un poco de éste para colocar sobre los muffins justo antes de meterlos en el horno. Cuando tengamos todo mezclado, pasamos a rellenar nuestros moldes o bandejas para muffins, y colocamos un poco de queso rallado sobre ellos. Los dejamos en el horno en torno a 25-30 minutos, o hasta que veamos que están hechos (pinchándolos con algo punzante y que salga limpio).
Una vez listos, podemos consumirlos como queramos, tanto calientes como fríos. ¡A nosotros nos gustó de las dos formas! Éste fue nuestro resultado!
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Un saludo golisneadores!
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